Éste es uno de los datos que salió a relucir ayer durante la reunión anual que mantuvo la fiscal especializada, Marta Durántez, con los responsables de los principales sindicatos (CC OO, UGT y CIG) para analizar la evolución de la siniestralidad laboral en la provincia.
Según los datos que trasladó Durántez a las centrales, el pasado año la Fiscalía abrió un total de 10 diligencias de investigación (dos más que el ejercicio anterior) y formuló 23 escritos de acusación frente a los 17 del anterior ejercicio por supuestos delitos relacionados con accidentes en el lugar de trabajo.
La labor desarrollada a lo largo de los últimos años por la Fiscalía especializada en siniestralidad laboral en coordinación con las autoridades laborales, fuerzas de seguridad y sindicatos comienza a dar sus frutos en forma de sentencias: Frente a los 10 fallos emitidos por los juzgados de lo Penal en 2008, durante el pasado año fueron un total de 20 los empresarios sentenciados por no respetar las medidas de seguridad o por su responsabilidad en algún accidente laboral de alguno de sus empleados. Además, la mayoría de las sentencias fueron condenatorias y se lograron tras alcanzar una conformidad entre las partes.
Tras valorar positivamente estos resultados, los sindicatos y la propia fiscal especializada incidieron en la importancia de redoblar esfuerzos a la hora de perseguir los delitos de riesgo. Es decir, detectar aquellos casos en los que una negligencia por acción o por omisión pueda poner en peligro la integridad física de un trabajador. El año pasado no se abrió ninguna diligencia por este tipo de delitos algo que sorprende tanto a la Fiscalía como a los propios sindicatos quienes dicen estar al corriente de situaciones que ponen en riesgo la integridad física de los trabajadores casi a diario. En este sentido, las centrales pidieron una mayor control por parte de Inspección de Trabajo, organismo que en la actualidad está dedicando muchos recursos a la gestión de los ERE frente a la labor de control en materia de seguridad. Las centrales insisten en reclamar más medios para Inspección de Trabajo.
Consecuencias de la crisis
Las centrales también denuncian una costumbre cada vez más frecuente en algunas empresas que solventan accidentes de carácter leve con la concesión de días de descanso al trabajador en lugar de comunicar el accidente a la mutua para así no acrecentar los pagos que luego han de realizar a la aseguradora. Desde centrales como UGT indican que las empresas aprovechan la situación de crisis para que los trabajadores acepten estas soluciones bajo la amenaza de la pérdida del empleo.
Los sindicatos también mostraron su preocupación por el incremento de la siniestralidad laboral de un 5% en la provincia en el primer trimestre del año. Ramón Vidal, secretario comarcal de UGT, advierte de que este incremento se produce a pesar del descenso en la actividad productiva debido a la recesión económica y pese al aumento del número de desempleados.
Tras los graves accidentes que se produjeron el pasado año en las obras de construcción del AVE en Ourense, la Fiscalía también comunicó a los sindicatos que se sigue de cerca la evolución de las obras en Pontevedra, hecho que constataron los sindicatos hasta el punto que “elimináronse as xornadas de ata 12 horas que había antes”, explica Ramón Vidal.
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