Dos trabajadores fallecieron esta tarde en el polígono industrial Río Norte de Alcobendas al derrumbarse parcialmente un edificio en construcción. En concreto, según testigos presenciales, la tercera planta del inmueble se desplomó sobre la segunda, lo que hizo que cediera el forjado.
P.O.P., español de 44 años, y R.T.W., nacido en Polonia hace 33 años, se encontraban trabajando en la planta número tres de la finca cuando el suelo cedió, al parecer por el mal fraguado del hormigón o por el vencimiento de los puntales de la primera planta, según las primeras hipótesis.
Hasta el lugar del suceso, que se produjo en torno a las 16.20 horas, acudieron 12 dotaciones del Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid, con un total de 46 efectivos, y agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, que realizaron la búsqueda de los atrapados, por espacio de unas dos horas, utilizando para ello a un grupo de perros especializados en este tipo de labores. En el interior del inmueble siniestrado, situado a la altura del kilómetro 3,5 de la M-603, se encontraba trabajando un grupo de 17 obreros, entre los que se encontraban los dos trabajadores que quedaron atrapados. A la zona también acudieron diez dotaciones del Summa 112 que tuvieron que asistir a cuatro de los obreros que sufrieron heridas leves.
Finalmente, un total de siete personas fueron trasladadas hasta el Hospital La Paz de Madrid. Cuatro de ellas presentaban múltiples contusiones de caracter leve, y las otros tres tenían heridas de mayor consideración pero su estado no revestía gravedad.
Durante el rescate, los servicios de emergencia desplazados a la zona intentaron contactar telefónicamente con los obreros atrapados entre los escombros, pero los trabajadores no respondían. Entre los restos del edificio se escuchó el sonido de un teléfono móvil pero ninguno de los operarios pudo atender la comunicación.
Por otro lado, fuentes de la empresa encargada de la obra, explicaron que en el momento del suceso se encontraban en el interior del inmueble 17 trabajadores y que, tras el conteo general, faltaban dos personas.
El secretario de organización de la Federación de Construcción de CCOO de Madrid, Julián Serrano, aseguró que las personas que trabajan en la obra “estaban sometidos a mucha presión para acabar las labores de construcción cuanto antes”. Serrano puntualizó que en la construcción hoy en día “no existe cualificación” y señaló que “es lamentable que sucedan cosas como ésta”.
Por su parte, La secretaria de Salud Laboral y Medio Ambiente de UGT-Madrid, Marisa Rufino, afirmó que con la muerte de los dos obreros son ya 86 las personas fallecidas este año en accidente laboral en la región. Además, Rufino explicó que su sindicato exige al Gobierno regional que las empresas sancionadas queden excluidas de la contratación y de las subvenciones públicas.
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