En el país se aplican antes de la cosecha de las plantas lo que multiplica los impactos en la salud y el suelo. Un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, FAO, estableció que cuatro plaguicidas muy usados y todas las formas de asbestos deben incluirse en una lista internacional de productos químicos sujetos a controles de comercio.
El primero es el monocrotofos, que es un insecticida utilizado para controlar los ácaros en el algodón, los cítricos, el arroz, el maíz y otros cultivos.
Lo comercializan activamente y lo producen una docena de compañías, casi todas en Asia. Sus nombres comerciales son: azodrin, azomark, monocron , nuvacron, polytrin. En el Ecuador, Agripac lo vende con el nombre de monodrin.
El documento establece que el monocrotofos, un insecticida orgánico hecho con base en fósforo, representa un peligro serio para cientos de miles de trabajadores agrícolas, “sobre todo en los países en vías de desarrollo, donde la falta de protección y equipos mecánicos hace más fácil que las personas entren en contacto con las substancias químicas”.
Cuando esto sucede, los síntomas del envenenamiento son: nausea, diarrea, visión borrosa y, en los casos más graves, depresión respiratoria, convulsiones y muerte.
Las recomendaciones hechas por los científicos, del Comité Transitorio de Revisión de las Substancias Químicas (ICRC) de la FAO, preparan el terreno para una decisión final, que se tomará en septiembre, en la cual se decidirá la inclusión del monocrotofos en la lista de sustancias químicas y plaguicidas cuya importación puede ser prohibida.
El segundo es el Carbofuran. Julio de La Torre, miembro de la Coordinadora Ecuatoriana de Agroecología, señala que los dos químicos son ampliamente usados en el agro ecuatoriano. “El problema es que se usa en dosis excesivas para el suelo y antes de la cosecha. Esto no permite que las plantas lo asimilen y el hombre lo ingiere directamente”.
Carlos García, gerente regional de Ventas de Agripac, señaló que están listos para reemplazarlos una vez que se prohíban legalmente. “Nuestra empresa brinda asesoría integral y buscamos que el uso de agroquímicos se reduzca a lo indispensable”, aclaró García.
La opinión del ICRC pasó al Comité Negociador Intergubernamental del Tratado de Rotterdam sobre el Procedimiento de Información y Consentimiento Previos (ICP) para substancias químicas y plaguicidas en el Comercio Internacional. Esta entidad se reunirá en Alemania, del 30 de septiembre al 4 de octubre. Si se adopta formalmente, el monocrotofos se incluirá en el ICP.
Este Comité también inició el proceso para incluir en la lista a otros plaguicidas como Granox TBC y el Spinox T . La primera pista la dio el Gobierno de Senegal (África). Sus autoridades investigaron las muertes en el sector rural y las vincularon con la aplicación de estos agroquímicos.
Este contenido ha sido publicado en la sección Noticias de Prevención de Riesgos Laborales en Prevention world.
