egún relata la Fiscalía Provincial de Córdoba en su informe provisional de acusación, los empleados utilizaban para el transporte y manipulación de los productos refrigerados carros isotérmicos cerrados en cuyo interior se colocaban las cajas. Para mantener baja la temperatura, utilizaban placas con líquido refrigerante. Pero, “con bastante frecuencia y debido a que los carros llegaban con las ruedas defectuosas o por otras razones”, las placas, que carecían de sujeción, se desprendían y golpeaban a los trabajadores.
El acusado -cuya identidad responde a las iniciales M. R. C.- era el encargado de velar por las medidas de seguridad y la protección de los operarios en el almacén y “a pesar de ser conocedor de los hechos no adoptó las iniciativas necesarias para solucionar el problema”. Así, el 11 de noviembre en el turno de tarde, cuando la víctima se encontraba bajo las órdenes del procesado, al abrir la puerta para descargar, se desprendieron dos placas y le golpearon en el cuello y en las cervicales, lo que le provocó una fractura dorsal.
La trabajadora le comunicó al acusado que se encontraba mal, pero M. R. C. “no le dio importancia”, por lo que tuvo que permanecer en su puesto de trabajo hasta las 23:00. El encartado se enfrenta a un año y seis meses de prisión por un presunto delito contra los derechos de los trabajadores.
Este contenido ha sido publicado en la sección Noticias de Prevención de Riesgos Laborales en Prevention world.
