La iniciativa, que se inició el pasado 23 de septiembre, se prolongará hasta finales de año a través de distintos soportes publicitarios. Entre ellos, destacan los anuncios que se colocarán en “mupis” de varias paradas de autobús en las localidades de Torrelavega, Castro Urdiales, Laredo y Camargo, así como en el centro de Santander.
El mensaje, para concienciar acerca de la importancia de tener una “buena salud laboral”, se colocará en zonas donde confluyen oficinas, despachos, locales comerciales, etc., para llegar a un mayor número de trabajadores. En la misma línea, se instalarán anuncios en paradas de autobús cercanas a polígonos industriales y centros comerciales.
Todo ello se acompañará de anuncios en prensa y medios especializados. Además, se han elaborado portanotas que se distribuirán entre los trabajadores y que llevan por lema “Trabajo sin drogas”.
La campaña fue presentada hoy por el director general de Salud Pública del Ejecutivo autonómico, Santiago Rodríguez, y el secretario general de Ceoe-Cepyme Cantabria, Yves Díaz-de-Villegas.
En rueda de prensa, Rodríguez señaló que el ámbito laboral es “idóneo” para actuar en materia de información y prevención frente al consumo de drogas al tratarse de un grupo de edad donde el consumo es “más alto” que en otros segmentos de población. “Prácticamente el único ámbito colectivo para llegar es el laboral”, apostilló.
Además, destacó que el perfil del consumidor actual de drogas ilegales ha cambiado ya que si hace años se identificaba fundamentalmente con la heroína, que creaba en el consumidor distorsiones sociales y laborales que le impedían trabajar, en la actualidad se centra más en la cocaína y el cannabis, que no alteran tanto la apariencia de quien las consume.
Respecto al consumo de drogas legales como el alcohol y el tabaco, el director general de Salud Pública dijo que se ha “consolidado” y causa, además “importantes problemas”.
En este sentido, afirmó que en torno al 34% de los trabajadores conocen a compañeros que “beben en exceso” y el 47% de la población laboral fuma en el trabajo, un porcentaje “más alto” que el que se da entre la población general.
Rodríguez también subrayó que al margen de los efectos sobre la salud individual, el consumo de drogas acentúa el riesgo de accidentes laborales. Al respecto, y según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), destacó que un tercio de los accidentes laborales mortales están relacionados con el consumo de sustancias nocivas. Además, bajo estos efectos, la tasa de accidentes aumenta de 2 a 3 veces y se triplica también las bajas laborales y el absentismo.
Por todo ello, subrayó la importancia de promover actuaciones preventivas en las empresas ya que, además de reducirse el consumo de drogas, se prevendrán también accidentes laborales.
Respecto a la campaña, Díaz-de-Villegas resaltó el mensaje “Trabajo sin drogas” es “claro” y “llega” de “un sólo golpe de vista”. El anuncio consiste en la simulación de una oferta de empleo pero que, en realidad, es “una oferta de salud” de una empresa “comprometida” con los empleados para que no consuman sustancias nocivas.
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