El grupo público Navantia (antes Izar y Astilleros Españoles, AESA) tendrá que indemnizar con 90.000 euros a la familia de J.A.P., que fue trabajador de astilleros españoles entre 1957 y 1963, tras una sentencia del Juzgado de lo Social nº 2 de Cádiz, que considera como hechos probados que en los trabajos desempeñados por el operario naval, “al cortar o desforrar tuberías cubiertas de amianto inhalaba directamente tal polvo de amianto“.
El trabajador falleció el 27 de septiembre de 2011. Un mes antes, su viuda recibió un informe del Hospital Universitario Puerta del Mar acreditando la sospecha de que el óbito se produjo por una enfermedad profesional originada por el amianto, según el letrado defensor de la familia.
A la hora de fijar la indemnización, más reducida de lo reclamado por la familia, el juez considera que si bien el trabajador solo estuvo seis años en el astillero y que el cáncer que sufrió no fue definido como “mesotelioma (característico de la asbestosis)”, la inspección sanitaria consideró que falleció a causa de una enfermedad profesional.
TRABAJADOR DE ASTILLEROS
Los hechos se remontan a los años 1957 a 1963, fecha en la que el trabajador fallecido, J.A.P., estuvo prestando sus servicios como trabajador de Astilleros Españoles y otras empresas auxiliares subcontratadas, como andamiero y soldador (tubero-calderero) en la industria naval, “trabajo en el cual estuvo en contacto directo con el polvo de amianto”, asegura el letrado defensor de la familia del fallecido.
Desde 1979, los astilleros dejaron de usar amianto en sus construcciones navales y reparaciones. El abogado defensor sostiene que “son muchas” las familias afectadas por el contacto con el amianto de los ex-trabajadores de astilleros de las décadas de los 50 (luego sería prohibido). “Hay que tener en cuenta que la asbestosis es una enfermedad latente y silente que en muchos casos puede no haber dado aún la cara”, señala. Una enfermedad cuya peligrosidad, según se expone en la sentencia, “ya se conocía desde 1927” por lo que las empresas que lo usaron en la década de los 50 conocían que no era inocuo. Sólo en Galicia la unidad de asbestosis del área hospitalaria de Ferrol trata actualmente a casi 1.200 enfermos. En 2012 hubo más de 20 fallecidos aunque allí se han logrado 30 sentencias a favor, en dos años de pleitos en los tribunales.
RELEVANCIA SOCIAL
Según el letrado defensor, la sentencia tiene un gran valor social y laboral dado se sospecha que pudieran darse más casos similares en la bahía de Cádiz porque fueron muchos los trabajadores en contacto con el amianto. La empresa no se ha pronunciado en torno a si interpondrá recurso de suplicación o no contra esta sentencia ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, si bien la familia ha decidido que no va a recurrir dicho fallo “quedando en espera de la decisión que se adopte al respecto la empresa”.
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