algien se acuerda?

@De locos wrote:

No creo que se pueda expresar mejor, lo dicho por xomaloga en su artículo sobre las luchas entre el derecho y la razón en el ámbito preventivo:

Muchas veces es justamente lo que he tratado de reflejar en mis post; cuanto más cerca estás de la decisión del día a día y más alejado del asesoramiento; más cerca estás de la razón y menos del derecho; porque si no, te pierdes el respeto a tí mismo, y por supuesto el de los demás.

Excelentes reflexiones las de los compañeros Xomaloga y De Locos.

Y al hilo de lo magistralmente expuesto, yo me atrevería a añadir una reflexión adicional, por eso de remover un poco más el árbol a ver qué es lo que cae.

Se ha planteado la cuestión del Derecho Vs la Razón, exponiendo que el primero es producido por los hombres y la segunda es una propiedad inmaterial que se puede tener o no.

La verdad es que siempre se tienen razones para actuar, aunque sea en ocasiones haciendo barbaridades como las que vemos constantemente. Esas razones proceden de la mente de las personas y, tengamos esto bien presente, nacen de una biografía personal en la que se han dado cita educación, experiencias, accidentes, incidentes, desarrollo de la personalidad, etc, etc, etc.

Con esto vengo a decir que para comprender las razones que llevan a un tío a subirse a un andamio sin montar correctamente, sin barandillas, etc… hay que tratar de ir más allá del puro derecho o de la pura razón, ya que en este caso ni el uno ni la otra nos van a ayudar para hacer lo más importante: descubrir en base a qué reglas está actuando la conducta de riesgo de ese individuo concreto y así poder seguir ese proceso hasta la incidencia actual, con el fin de poder entender dónde está el posible punto de cambio de esa conducta.

El modelo ABC que usamos en psicología es importante señalarlo, pero ligeramente adaptado:
– Antecedentes de una situación: Aquellos estímulos que acaban activando determinadas conductas.
– Biografía: todo lo que haya podido vivir, hacer, ver, esa persona que le lleva a realizar algo de una manera concreta.
– Consecuencias: conducta sancionada o perseguida.

Recordemos que el operario infractor/inspector/ juez no siempre tendrán LA razón, pero siempre van a tener SUS razones.

A veces es posible equilibrar la necesidad de cubrirse las espaldas legalmente, hacer las cosas seguras y convencer al que ejecuta el trabajo (y por ello, al que se la juega) de que se pueden hacer las cosas de tal manera que las hagamos bien, de una forma relativa y calculadamente segura y además conforme al espíritu de la norma, aunque a priori pareciera que estamos fuera de la misma.

Y aquí se da el caso de que se puede intervenir sobre todos los puntos del ABC, pero que lo mejor, siempre que sea posible, es intervenir sobre A y B, ya que son los puntos previos a C, esa conducta de riesgo.

Los antecedentes los abordamos al establecer equipos y procesos seguros, de manera que no hay opción a la conducta de riesgo. Ejemplo: andamio “europeo” que trae las barandillas como elemento estructural sin el cual no hay andamio Vs andamio “tradicional” en el que las barandillas son una opción.

Los puntos de la biografía, B, los abordamos no cambiando algo que no podemos cambiar como es el pasado, sino que lo hacemos reescribiendo una nueva experiencia sobre las anteriores. Y esto se consigue con las “C”, de manera que llevamos la cadena causal del riesgo detectada en “B”, hasta las consecuencias que podría haber en “C” y así ayudamos a reflexionar para que en “B” se tome otro camino alternativo.

Así, unificamos los puntos de la ecuación, sin olvidarnos que cada uno tiene sus razones y que, aunque partan de lugares distintos, todas pretenden llegar al mismo buen puerto: que seas feliz contándole miles de batallistas a tus nietos.

Recuerdo un ejemplo de unos estructuristas que diseñaron su propio castillete de hormigonado mediante ensayo y error. Lo hicieron en base a sus razones de operatividad, seguridad, eficiencia, etc… y la verdad es que era la leche de bueno. Como imaginareis, llegó el IT de turno y claro, eso no era “legal”, aunque no había en la ley nada que tumbara ese castillete en la realidad del trabajo duro diario (eso sólo podría hacerlo Chuck Norris con una de sus giratorias)
Llegaron a un punto de entendimiento: certifiquen su equipo y santas pascuas.

Saludos

Aitor