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Buenas,
Una consulta relacionada con las evaluaciones de riesgo. En mi empresa, del sector naval, los contratistas presentan evaluaciones de riesgo generales para trabajos en buques, mi pregunta es ¿Deberían ser específicas?, es decir, una por cada buque, con el trabajo específico que van a realizar, riesgos, medidas, o valdría con la general para trabajos en buques, donde contempla todas las actividades de la empresa, riesgos generales, medidas…
Muchas gracias.
La evaluación de riesgos debe ser específica de los trabajos, equipos e instalaciones sobre las que se trabaja.
Pero, ¿Cuánto puede ser de específicas las evaluaciones? ¿Qué grado de premonición e imaginación pueden tener los TPRL y los responsables de los trabajos para “imaginarse”, “acordarse” o “prever” todas las situaciones posibles?
En el sector naval (al igual que algún otro donde hay ciertas rutinas que podrían considerarse repetitivas, pero ejecutadas sobre condiciones de trabajo cambiantes, variables e incluso casi imposibles de prever) es muy difícil ajustar la evaluación al 100% de las condiciones de trabajo.
Por eso, me parece bastante razonable que haya un cuerpo central todo lo específico posible pero necesariamente general; donde figuren los criterios de seguridad aplicables; complementado por evaluaciones o estudios previos de tareas o situaciones de trabajo, bien sea a base de permisos de trabajo, bien sea como evaluaciones previas.
En éstas es donde se podrá especificar los detalles de aplicación de ciertos criterios generales al terreno concreto. Además de dicha ventaja, tiene la de involucrar a toda la cadena de mando y a toda la organización en el día a día preventivo.
Hacerlo de otra forma, me parece irreal; y quien piense que una evaluación de riesgos puede ajustarse 100% a la realidad futura; es alguien que nunca ha pisado terreno fuera de su oficina.
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