El lupus es una enfermedad autoinmune y, por tanto, no relacionada con la actividad laboral. Sin embargo, los pacientes de lupus deben evitar especialmente la exposición solar prolongada sin protección tipo “pantalla total”.
En el caso de tratarse de un lupus eritematoso sistémico o diseminado, además habría que contemplar los posibles efectos secundarios derivados de los tratamientos con inmunosupresores