La primera causa de baja laboral entre los conductores de la EMT es la gastroenteritis, una dolencia que el grupo socialista la atribuye a la falta de higiene en los vehículos y a que los chóferes comen muchas veces en el asiento. La empresa asegura que no hay ninguna relación causa-efecto y que los autobuses se limpian a diario.
Treinta y dos gastroenteritis agudas en el primer trimestre de 2003, 29 en el segundo trimestre y 31 en el tercero, y una media de 300 bajas laborales al mes. Este es el porcentaje de absentismo y la enfermedad más habitual entre la plantilla de conductores de la EMT.
“Esta es la primera causa de enfermedad y no es una dolencia muy normal”, afirmó ayer el concejal socialista Matías Alonso.
La oposición asegura que es debido a la falta de limpieza de los autobuses y sobre todo de las cabinas donde trabajan los conductores. “Muchos comen en el propio asiento y el habitáculo es un nido de gérmenes que generan estas dolencias”, afirmó Matías Alonso.
Los socialistas mantienen que una brigada de 20 personas limpia la flota de los 420 autobuses operativos. “Ahora en verano son muchos menos y apenas les dan tiempo a barrer los autobuses”, afirmó Alonso.
El concejal de Tráfico, Alfonso Novo, sin embargo, negó rotundamente ayer estas afirmaciones y señaló que no hay ninguna relación causa efecto entre estas enfermedades con las condiciones laborales en las que trabajan los empleados. “Me sorprenden estas críticas porque los autobuses se limpian y se desinfectan a diario”, aseguró el concejal de Tráfico.
La plantilla de 1.200 conductores tiene una media de 300 días de bajas mensuales y tras la gastroenteritis aguda, la segunda dolencia más común es el lumbago, seguida por la cervicalgia, el estrés, la depresión y la ansiedad. Otras causas menos frecuentes son las contusiones, las gripes y bronquitis, sobre todo en invierno, o la ciática.
La franja de edad en la que se producen con más frecuencia estas dolencias es en conductores de entre 31 y 50 años y en menor medida en los de entre 51 y 60 años, mientras que los más jóvenes, de entre 21 y 30 años son los que apenas sufren bajas.
“El pasado invierno se produjeron 96 casos de gripe y 32 de gastroenteritis, pero en el resto del año esta última enfermedad fue la más común”, matizó el concejal socialista.
La oposición también denuncia que la normativa sobre prevención laboral exige la instalación de aseos en cada final de trayecto. “Sin embargo, yo tengo constancia de que hay sólo dos y en condiciones infrahumanas”, aseguró el concejal socialista.
El Ayuntamiento, por su parte, rebatió todos estos argumentos y mantiene que la Empresa Municipal de Transportes cumple las medidas de seguridad laboral y “nuestro equipo médico va a estudiar el motivo de estas bajas, pero desde luego no hay ninguna razón en la que tenga que ver la empresa”, concluyó Alfonso Novo.
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