Un estudio del Hospital Casa de Salud de Valencia revela que las mujeres toman el doble de sedantes que los hombres, aunque son capaces de reconocer esta adicción con más facilidad.
El coordinador de la Unidad de Conductas adictivas del Hospital Casa Salud, José Olcina, asegura que “en España se consumen al año más de 24 millones de cajas de tranquilizantes y lo que, en principio, se suele utilizar para ayudar a dormir puede acabar convirtiéndose en un grave problema”.
Este estudio también evidencia que las mujeres de 50 años y que llevan alrededor de 15 años tomando pastillas es el perfil de la persona adicta a los sedantes.
Para Olcina, “el papel todavía machista de la mujer en la sociedad, el estrés diario, la ansiedad, los trastornos hormonales y las depresiones son sólo algunas de las causas por las que existe más tendencia a que la mujer sea dependiente de los sedantes o los tranquilizantes”.
El especialista en psiquiatría señala que “una de las formas más peligrosas de automedicación es cuando el médico receta una serie de sedantes al paciente y éste, aunque ya no los necesita, sigue tomándolos y perpetúa su consumo”.
Es en ese punto, añade Olcina, “cuando se habla de una adicción y que se debe tratar, y se debe suprimir esa medicación aunque al principio el paciente tenga inseguridad, ansiedad o síntomas de abstinencia”.
En cuanto a los efectos secundarios, el doctor explica que “en primer lugar se puede hablar de efectos físicos, como son la disminución de los reflejos, de los movimientos, la falta de concentración o el vértigo”.
También se dan efectos psicológicos como la tolerancia a la psicomotricidad o la “respuesta paradójica”, es decir, que el paciente se ponga nervioso al tomar tranquilizantes y tengan un efecto contrario al que se pretende, algo que “puede culminar en ocasiones en actitudes violentas o indeseadas”, advierte José Olcina.
La adicción a los sedantes también tiene efectos secundarios graves en las mujeres embarazadas, según el especialista, ya que “pueden provocar alteraciones o malformaciones en el feto durante el primer trimestre.”
En todo caso, el coordinador de la Unidad de Conductas Adictivas de la Salud, insiste en que hay que combatir este tipo de adicciones cuanto antes, con un programa de deshabituación progresiva, reduciendo las tomas, que en algunos casos requiere el ingreso del paciente
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