Casi 400 trabajadores perdieron la vida en accidentes laborales en los primeros cuatro meses de este año. Según los datos oficiales facilitados por el Ministerio de Trabajo, en este intervalo de tiempo se han producido en nuestro país 397 muertes por siniestralidad en el trabajo, lo que supone un incremento del 17,8% respecto al mismo periodo del año anterior.
Este aumento de accidentes mortales varía la tendencia a la baja iniciada en 2001, en el que por primera vez en cuatro años disminuyó el número de fallecidos en siniestros laborales. Si continúa la progresión de los cuatro primeros meses de este año, 2002 podría alcanzar las mayores cotas de accidentes laborales mortales de la última década.
A pesar de estos datos, el número total de accidentes de trabajo con baja ha descendido un 4,3% en el primer cuatrimestre de 2002.En cambio, los accidentes in itinere con baja aumentaron un 1,4%, como también ascendió el número de casos de enfermedades profesionales, con un 4,7%.
En todos los sectores se redujeron los accidentes de trabajo con baja, si bien el industrial fue el más favorecido, con un descenso del 9,2%.
Por comunidades, la siniestralidad laboral aumentó en Ceuta y Melilla, Extremadura, Galicia y Castilla y León, mientras que descendió en el resto.
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