• Autor de la entrada:
  • Categoría de la entrada:Noticias
  • Tiempo de lectura:3 minutos de lectura

Los sensores de gas pueden salvar vidas y evitar catástrofes en ámbitos tan diferentes como la detección de incendios y la seguridad en aeronaves. Se están desarrollando nanotecnologías nuevas con el fin de perfeccionar la detección de diversos peligros relacionados con gases.
En muchos ámbitos, la seguridad y la protección se fundamentan en la detección de gases, por ejemplo en el caso de incendios, fugas de gas y atentados con sustancias químicas. Actualmente existe una preferencia por sistemas de detección de gas de menor tamaño y mayor fiabilidad basados en los llamados sensores de gas de estado sólido, resultantes a su vez de los avances en nanotecnología.

El proyecto financiado con fondos europeos Nanos4 («Sensores de gas de estado sólido, nanoestructurados y de rendimiento superior») desarrolló unos novedosos sensores de óxido metálico (MOx) de estado sólido que presentan una sensibilidad y eficiencia muy elevadas.

La tecnología está basada en nanocintas cristalinas únicas y nanocintas estables hechas de óxido de estaño (SnO2), óxido de cinc (ZnO) y óxido de indio (III) (In2O3). Éstas se integraron en la tecnología y se eliminaron los nanohilos habituales en modelos anteriores, lo que permitió una integración directa en los dispositivos de detección de gases. El uso de óxido metálico para obtener estos dispositivos, así como nanocristales y nanopolvos específicos, ha incrementado la eficiencia de la tecnología hasta niveles sin precedentes. Otras técnicas empleadas son la evaporación por haz de electrones, la síntesis hidrotérmica y la síntesis electromecánica.

También se han estudiado las interacciones entre gases y superficies y modelos eléctricos, impulsando así el estado de la técnica y contribuyendo al desarrollo de mejores productos comerciales. En la fase de ensayos, se integraron series de sensores de gas en sistemas de microrreactor diminutos y se hicieron funcionar con microbombas. Además se desarrolló una serie portátil de sensores para microrreactor que permite prever numerosas aplicaciones comerciales.

Los socios del proyecto definieron los distintos usos que podrían darse a esta tecnología. Entre ellos, la detección de incendios en general, la detección temprana de incendios en aeronaves, la monitorización del aire en cabina, la detección de ozono, monóxido de carbono y diversos olores, procesos de combustión y vigilancia medioambiental, por citar algunos.

Los sensores se sometieron a pruebas satisfactorias de estabilidad mecánica y medioambiental; también se probaron en tierra varios prototipos y se siguieron perfeccionando. Ya se han definido aplicaciones nuevas y se ha entablado contacto con posibles socios industriales.

Por último, se preparó un plan de producción y comercialización para tres de los procesos de producción seleccionados, concretamente para fabricación de películas delgadas, nanohilos y nanopolvos. Una vez que se materialicen, la detección de gases alcanzará un nivel sin precedentes.

0 0 votos
Valoración

cordis.europa.eu

Este contenido ha sido publicado en la sección Noticias de Prevención de Riesgos Laborales en Prevention world.

Suscribirme
Notificar de
guest
:arrow: 
:D 
:? 
8-) 
:cry: 
:shock: 
:evil: 
:!: 
:geek: 
:idea: 
:lol: 
:x 
:mrgreen: 
:| 
:?: 
:P 
:oops: 
:roll: 
:( 
:) 
:o 
:twisted: 
:ugeek: 
;) 
 
0 Comentarios
Inline Feedbacks
Ver todos los comentarios