Así lo subrayó ayer su secretario general en Córdoba, Isaías Ortega, que precisó que es preocupante cómo cada día mueren dos trabajadores en sus puestos de empleo, unos 18 sufren un accidente grave y tienen una siniestralidad leve más de 1.800 personas en el transcurso de su actividad laboral. Además, considera negativo cómo las enfermedades profesionales no afloran y son tratadas como comunes. Por ello, cree que es necesaria una reforma del reglamento de colaboración de las mutuas de la Seguridad Social. También se está luchando para que los riesgos psicosociales (violencia en el trabajo, acoso o estrés) se incluyan como enfermedades profesionales.
Al mismo tiempo, Ortega apuntó ayer que su sindicato ha constituido recientemente el Consejo Provincial de Seguridad y Salud Laboral para promover iniciativas que hagan efectiva la prevención de los riesgos laborales y la puesta en práctica de programas preventivos, además de hacer un seguimiento del grado de aplicación de la ley.
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