Un terremoto de magnitud 8,2 en la escala de Richter y de larga duración se ha producido en el norte de Chile a las 20.46 hora local (1.46 en la España peninsular). Las autoridades de la Oficina Nacional de Emergencias (ONEMI) activaron la alerta por tsunami y ordenaron evacuar de forma preventiva todo el borde costero chileno, de unos 4.329 kilómetros, unas 900.000 personas en total. La población que vive cerca del Pacífico se ha refugiado en zonas de mayor altura. Las olas provocadas por el tsunami —de unos dos metros— han dejado algunas inundaciones en las calles más próximas al mar, aunque no ha causado grandes daños. Las autoridades chilenas ya han retirado la alerta para la gran parte de su territorio costero. El Centro de Alerta de Tsunami del Pacífico la ha retirado para toda la costa chilena.
Las autoridades han informado que se han registrado al menos cinco muertos a causa del terremoto: cuatro hombres y una mujer, en Iquique y Alto Hospicio, a causa de infartos y aplastamientos.
El jefe de gabinete de la Presidenta Michelle Bachelet también ha indicado que las Fuerzas Armadas y Carabineros han tomado el control de la ciudad de Iquique, a 1.787 kilómetros al norte de Santiago, donde unas trescientas mujeres se han fugado de la cárcel. En plena noche, la ciudad solamente contaba con un 10% de electricidad.
El epicentro del seísmo se ha situado en el mar, a 89 kilómetros al suroeste de la localidad de Cuya, en la región de Tarapacá del extremo norte de Chile. La ONEMI informó de que los movimientos marítimos se comenzaron a producir paulatinamente de el sur. Las estimaciones indican que las olas llegarán hacia las 4.00 hora local en el extremo sur de la Antártida.
No se han registrado daños de infraestructura importante, pero la información todavía es precaria y se va conociendo poco a poco. Las comunicaciones telefónicas se han visto afectadas en el norte, aunque están regularizadas, y existen algunas carreteras cortadas producto del desprendimiento de tierra, entre ellas una que comunica con Bolivia. El símbolo de la ciudad de Arica, el Morro, un icono de soberanía chilena, también ha sufrido daños.
En Santiago de Chile, la capital, que no colinda con el Pacífico, no se ha sentido el seísmo y las máximas autoridades políticas y técnicas han conformado el Comité de Operaciones de Emergencia a nivel nacional y regional.
Con las alarmas de tsunami de fondo, la población se trasladó de manera general en orden hacia los cerros, salvo en la ciudad de Antofagasta, donde la gente se ha desesperado y ha escapado en sus vehículos.
Durante la noche se han producido más de una docena de réplicas del terremoto en la zona norte chilena y, según han informado las autoridades chilenas, la alerta se ha extendido a las autoridades de otros países de Latinoamérica, como Perú, Ecuador, Colombia, Panamá, Costa Rica y El Salvador, aunque han sido canceladas ante de la medianoche, salvo en Ecuador.
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