Sin perjuicio de la responsabilidad legal del empresario, como deudor de la seguridad y la salud de los trabajadores, lo cierto es que sin la concienciación y la colaboración de estos últimos nunca se podrá lograr el fin deseado por todos: la eliminación de los accidentes de trabajo. Las empresas, por tanto, tienen que poner todos los medios y vigilar para que la norma se cumpla, pero es necesario la complicidad y la colaboración del trabajador para que estos medios sean efectivos. El empresario debe actuar como un buen padre de familia, vigilando, protegiendo a sus trabajadores para que no sufran ningún desafortunado accidente, pero no debemos olvidar que todos los miembros de la empresa, tanto el personal trabajador como el directivo, están involucrados en las políticas de prevención de riesgos laborales y, por tanto, tienen sus derechos y obligaciones en esta materia.
Es preciso poner de relieve, por un lado, que la provincia de Cádiz cuenta con un tejido empresarial compuesto en su mayoría por pymes y micropymes, las cuales son las principales generadoras de empleo, y por otro lado, que estamos hablando de una legislación terriblemente compleja. De esta forma, la administración debe comprender y facilitar a este tipo de empresas para que, sin renunciar en ningún caso a la aplicación de toda la normativa, esta aplicación sea ágil, sencilla, práctica, coherente y no formalista, de forma que se vean los resultados positivos. Por tanto, es necesario como ya he mencionado, la colaboración de todos en una materia que es de interés común. De ahí que desde la Unidad Territorial de Prevención de Riesgos Laborales de la Confederación de Empresarios de la provincia de Cádiz (CEC), integrada en el departamento Jurídico-Laboral, se esté llevando a cabo una labor de promoción y de implantación de la cultura preventiva en la provincia, desarrollando múltiples actividades para que el sector empresarial asuma la importancia de la prevención de riesgos laborales en las empresas. Si obviar el enorme esfuerzo que están realizando el empresariado durante los últimos años, desde el punto de vista organizativo, productivo, económico y de empleo, para mejorar en todo lo concerniente a la prevención de riesgos laborales. Por ello, desde la CEC consideramos que el fomento de la cultura preventiva es uno de los principales retos que tenemos por delante, de manera que todos los agentes implicados en la prevención puedan asumir la importancia de la prevención, de forma que la eliminación de los accidentes laborales sea una realidad en un futuro cercano gracias a la colaboración de todos.
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