Las empresas de la Región de Murcia registraron de enero a junio de este año 1.783 accidentes de trabajo por cada 100.000 empleados, frente a los 1.864,9 del mismo periodo del año pasado, lo que supone una caída del 4,4% en las cifras de siniestralidad laboral que ayer presentó el consejero de Empleo, Universidades, Empresa y Medio Ambiente, Javier Celdrán.
Uno de los datos más destacables del informe elaborado por el Instituto de Salud y Seguridad Laboral (ISSL) es el que se refiere a los accidentes mortales, que se han reducido en el mismo período hasta el 46%. Según el llamado «índice de incidencia» que maneja el ISSL (número de accidentes por cada 100.000 empleados), la reducción alcanza el 55%. Traducido, los 13 trabajadores fallecidos en los seis primeros meses de 2017 han pasado a siete en el mismo período de 2018.
En total, se registraron en el primer semestre del año 8.549 accidentes laborales con baja en jornada de trabajo, de los que 8.494 fueron leves, 49 graves y seis mortales. En cuanto a los accidentes laborales ‘in itinere’, se registraron en este periodo 1.172, de los que 1.157 fueron leves, 14 fueron graves y uno arrojó una víctima mortal.
La lucha del Gobierno regional y de la Consejería encabezada por Celdrán contra la siniestralidad laboral, así como la caída de las cifras globales de los accidentes en el trabajo, se han visto ensombrecidas en este nuevo informe por el aumento de los siniestros que se registran en la construcción, el único sector de actividad en el que aumentan los incidentes con baja laboral y que sigue manteniendo una tendencia al alza.
En este sentido, el ladrillo se anotó un incremento del 3% en el índice de incidencia de enero a junio, con 3.426,3 siniestros por cada 100.000 trabajadores. Agricultura, con un índice de 2.576,3 accidentes, registró la mayor disminución, un 10,2% menos que en 2017, siendo el sector con mejores resultados. Industria, con 2.733,7 percances, bajó un 0,8%; y servicios registró 1.238,4 incidencias con baja por cada 100.000 trabajadores, lo que supone un descenso del 3,5% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
En el último informe anual del Instituto de Salud y Seguridad Laboral elaborado para el Consejo Económico y Social (CES), en el que se recogían datos relativos a todo 2017, la construcción mantenía un incremento de los accidentes de trabajo del 5,2%. Sin embargo, el índice de incidencia de siniestralidad subió el año pasado en todos los sectores, según el mismo documento.
«Todos tenemos que seguir poniendo los medios para incrementar la salud laboral, tanto Administración, patronal, sindicatos y cada empresa y trabajador. Detrás de cada accidente hay un drama personal y, aunque el primer semestre del año arroje datos de disminución, no hay que bajar la guardia ni un segundo», aseguró Celdrán. Preguntado en rueda de prensa, el consejero se refirió a la tendencia que presenta la construcción, en contraposición con la ‘remontada’ del resto de sectores económicos: «En este caso, estamos hablando de que ha habido un repunte de la actividad tras la crisis. Y además, como ocurre con la agricultura, requiere de un perfil de trabajadores menos cualificado. Esto no quiere decir que se deban realizar menos actividades de formación y prevención, todo lo contrario. Es muy importante extremar la vigilancia y la inspección en sectores como el agrícola o la construcción. Por eso dirigimos habitualmente las campañas de inspección de la Comunidad Autónoma. Creemos que es muy importante que, en estos sectores, a los que suelen llegar empresarios con poca experiencia, haya más inspección y se trabaje más en la formación».
Celdrán también puso el acento en los accidentes ‘in itinere’. En el primer semestre del año, el índice de incidencia fue de 244,4 accidentes de trabajo por cada 100.000 afiliados a la Seguridad Social, lo que supuso una subida del 0,8% con respecto al mismo periodo del año pasado. En este sentido, y por grado de lesión, el dato más preocupante hay que encontrarlo en los siniestros graves, que se han disparado casi un 70%. Los accidentes ‘in itinere’ con víctimas mortales aumentaron el 0,2%, ya que el año pasado no hubo ningún fallecido, por uno registrado de enero a junio de este año.
A juicio del consejero de Empleo, «es fundamental que estemos siempre alerta, tanto en nuestro puesto de trabajo como en los desplazamientos que hacemos hasta el mismo. Nos preocupa este repunte de las incidencias de accidentes ‘in itinere’, que además han aumentado en gravedad». Asimismo, el número de trabajadores fallecidos mientras desarrollaban su jornada laboral en la carretera sigue inalterable: cuatro en el primer semestre del año pasado, y otros cuatro en el mismo periodo de 2018.
El descenso generalizado en las cifras, a pesar de los borrones destacados por el propio Celdrán y a la espera de los datos finales del año, que se conocerán a partir de diciembre, viene a paliar el incremento en los accidentes laborales que se registró el año pasado en las empresas murcianas. Según el Instituto de Salud y Seguridad Laboral, los siniestros aumentaron en 2017 un 3,7% en relación con el ejercicio anterior. De hecho, los 3.578 percances con baja registrados por cada 100.000 habitantes el año pasado fue la cifra más alta desde 2012. Por si fuera poco, los accidentes mortales aumentaron en 2017 un 16,7% con respecto al año anterior.
Celdrán explicó que el Gobierno está trabajando en el Plan de Prevención Laboral 2019-2021, que contempla nuevas medidas para formar y asesorar a trabajadores y empresarios. El objetivo es «reducir los accidentes, mejorar las condiciones de seguridad en los puestos de trabajo y crear entornos más seguros».
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